Cuatro frailes franciscanos fueron ordenados sacerdotes el 29 de junio, solemnidad de los santos Pedro y Pablo, en la iglesia de San Salvador de Jerusalén. La misa fue presidida por el patriarca latino de Jerusalén, S.B. Pierbattista Pizzaballa. Además del Custodio de Tierra Santa, también estaba presente fray Sebastian Unsner en representación de la provincia de San Francisco en África, Madagascar y Mauricio, de donde proceden tres de los cuatro nuevos sacerdotes.
Los nuevos sacerdotes
Los cuatro nuevos sacerdotes fueron presentados por el Custodio de Tierra Santa, fray Francesco Patton, tras la proclamación del Evangelio. Vienen de Malawi, Kenia, Burundi y Congo. Fueron enviados por sus superiores a Jerusalén para realizar estudios teológicos, al final de los cuales fueron ordenados presbíteros. Dentro de unas semanas regresarán a sus provincias (San Francisco en África, Madagascar y Mauricio y Nuestra Señora de África). Son fray Amose Daniel Mwale, fray Joseph Wambugu Kinyanjui, fray Philippe Nikiza y frat Jean Mogoda Kogba.
La buena batalla
La homilía se centró sobre el tema paulino de la “buena batalla de la fe”. El patriarca invitó a los nuevos sacerdotes a vigilar siempre su corazón y su relación con Dios. Para ello, comentó el “Evangelio de Cesárea”: “Jesús plantea la pregunta que está en el origen de nuestra fe y nuestra vocación: “¿Quién soy yo para vosotros?” Si esta pregunta da verdadero entusiasmo a vuestra vida sacerdotal, entonces os convertiréis también en defensores de la fe y valientes luchadores de la “buena batalla”.
El rito de la ordenación
Después de la homilía se celebró el rito de la ordenación. Los candidatos se postraron en el suelo mientras se cantaban las letanías de los santos. Inmediatamente después, el patriarca recitó la oración de consagración. A continuación, la vestición con los hábitos sacerdotales (la estola y la casulla), la unción crismal y la entrega del cáliz y la patena. Luego, los nuevos sacerdotes se acercaron al altar para participar como presbíteros en la consagración del pan y el vino.
Sacerdotes para servir
Al final de la misa, el Custodio tomó la palabra: “Continuad siendo sacerdotes con la mentalidad de servicio del diaconado”, les alentó. Tuvo palabras también para las familias de los nuevos sacerdotes: “Recibisteis a vuestros hijos como un regalo de dios y hoy se los devolvéis para que sirvan al pueblo de Dios”
Primeras misas
A partir de hoy – como dijo el patriarca – “la Iglesia tendrá cuatro nuevos “combatientes pacíficos” de la fe”. Los nuevos sacerdotes celebrarán la “primera misa” en Tierra Santa: fray Joseph el 30 de junio a las 7 en San Francisco en el Cenáculo, fray Philippe el 1 de julio a las 6 en el Monte Calvario, fray Amose el 2 de julio a las 8;30 en San Salvador y fray Jean el 2 de julio en Ein Karem.
Marinella Bandini
