Los días 22 y 23 de mayo de 2023 el Christian Information Center (CIC) celebró el quincuagésimo aniversario de su inauguración. Durante esos dos días, tuvieron lugar varios actos de celebración en los que se repasó la historia del centro y la del edificio que lo alberga. Una historia que habla de servicio y de diálogo, de asistencia al peregrino y de “formación e información cristiana” a lo largo de medio siglo.
La doble cita, convocada en la sede del CIC en Jerusalén, permitió realizar la ceremonia en dos idiomas distintos: el martes 22 en inglés y el miércoles 23 en italiano. Asistió a ambas el Custodio de Tierra Santa, padre Francesco Patton, que dio la bienvenida a los invitados. Entre los ponentes se encontraban el director del CIC, fray Giorgio Kray, la asistente de dirección, sor Naomi Zibermann, el profesor de Historia de la Iglesia de la Custodia de Tierra Santa en el SBF, fray Narcyz Klimas y el exdirector del centro, fray Tomasz Dubiel.
Los alumnos del conservatorio “Magnificat”, encabezados por el director del Instituto y Secretario de Tierra Santa, fray Alberto Joan Pari, y por la subdirectora Giuliana Mettini, amenizaron los dos eventos entreteniendo a los asistentes con actuaciones de canto y música instrumental.
El Christian Information Center nace en 1973 para ayudar a los peregrinos que viajan a Jerusalén y proporcionarles información sobre el cristianismo en Tierra Santa.
Años antes,la Custodia de Tierra Santa tuvo la intuición de adquirir la propiedad del inmueble y destinarlo a actividades de formación e información cristiana. Dada su ubicación estratégica cerca de la entrada principal al barrio cristiano de la ciudad, es decir, la Puerta de Jaffa, el CIC siempre ha funcionado como punto de referencia para los peregrinos de viaje.
En las diferentes ponencias que se sucedieron estos días se reiteró la vocación ecuménica e interreligiosa del centro. De hecho, el CIC pretende proporcionar a todas las iglesias cristianas un servicio de información completo, alimentando así la ambición de ser “puente” entre todas las confesiones cristianas de Tierra Santa.
Hoy la actividad del centro se divide en tres frentes: ofrece un servicio de información inmediata a los peregrinos, turistas y residentes, con una plantilla permanente, disponible y competente; proporciona a los medios de comunicación, investigadores y comunidades religiosas información sobre los diversos actos religiosos, científicos y culturales, o simplemente sobre la vida cristiana en Tierra Santa; y pone sus espacios a disposición de las distintas entidades locales para encuentros ecuménicos, personales y otros actos religiosos y culturales.
Actividades y servicios que son posibles desde hace cincuenta años gracias a la proximidad del Christian Information Center a las diversas realidades locales y a su voluntad de promover siempre nuevas y mejores relaciones. “Estamos vinculados al servicio a los peregrinos, pero también a la comunidad local. De hecho, no se puede vivir aquí y realizar un auténtico servicio si antes no se establece un diálogo con quienes están presentes in situ. Ese diálogo debe basarse en la acogida de los valores humanos de cada persona y en el respeto a la identidad religiosa de cada uno. Nosotros nunca investigamos sobre las personas que llegan, sino que acogemos a todos”, afirmó fray Giorgio Kray en su intervención ante los Ordinarios Católicos de Tierra Santa. Al encuentro del miércoles 24 también asistieron, entre otros, el Patriarca Latino de Jerusalén, monseñor Pierbattista Pizzaballa y el nuncio apostólico para Israel y delegado apostólico para Jerusalén y Palestina, monseñor Tito Yllana.
Tras recorrer la historia del centro y presentar la llamada “Experience of Resurrection" (instalación multimedia en los locales del CIC inaugurada el verano de 2022), se expusieron los resultados de los últimos 50 años de actividad mediante la presentación de estadísticas, citas y experiencias. Con una mirada hacia el futuro, el padre Kray finalmente concluyó: “Espero que el Christian Information Center continúe siendo un faro de esperanza y unidad para todas las Iglesias que encuentran aquí el origen de su fe y que también sea fuente de diálogo y reconciliación a nivel interreligioso y social para judíos, cristianos y musulmanes, en esta ciudad santa”.
Filippo De Grazia