También en Belén continúan los actos del año jubilar y los estudiantes del Terra Santa College se dirigieron, cantando y rezando, hacia el Campo de los Pastores.
Por las calles de Belén, acompañados por sus profesores y el director de la escuela, fray George Haddad, los alumnos del sexto al undécimo grado (11-16 años) caminaron juntos hacia el Campo de los Pastores, donde después celebraron la misa en la capilla croata, inaugurada hace pocas semanas.
Bajo el cálido sol primaveral de Belén, partiendo del patio de la escuela, los estudiantes se dirigieron a Beit Sahour, el hogar de los pastores. Guiados por el megáfono que entonaba los cantos y recitaba las decenas del rosario, recorrieron las calles de Belén, saludados por los transeúntes y los comerciantes que, desde las puertas de sus negocios, rezaban con ellos. Además de estudiantes y profesores, también estaban presentes algunos padres, precisamente para subrayar el significado de caminar todos juntos durante este año jubilar. Tras la misa, un momento de descanso a la sombra de los olivos, y después el grupo regresó a la escuela.
“Esta caminata desde la escuela hasta aquí tiene como objetivo ayudar a los jóvenes a descubrir de nuevo el don de ser hijos de la Tierra Santa, de ser habitantes de Belén. Queremos ayudarlos a redescubrir de nuevo esta belleza, porque mucha gente de fuera quiere estar aquí, mientras que ellos, en su vida cotidiana, a veces olvidan este privilegio”.
Con estas palabras fray George quiso explicar el significado de esta mañana, que no es solamente un acto del año jubilar, sino también un signo de esperanza para todos los jóvenes que encuentra diariamente durante su ministerio en el Terra Santa College.
“Vivir la misericordia, vivir la esperanza, vivir la caridad entre nosotros. Jesús nos dijo: amad a vuestros enemigos. Pero para vivir el amor, debemos primero vivirlo con nosotros mismos, en nuestras familias, después en nuestro entorno como la escuela o la sociedad”.
Así siguió fray George en su homilía, intentando dejar a los jóvenes presentes un mensaje de esperanza, para que no se dejen abrumar por el desaliento sino que puedan redescubrir cada día la fuerza y la belleza de la Tierra Santa, mirando al futuro con esperanza.
Francesco Guaraldi