El Secretario de Estado del Vaticano visita el Monte Nebo

La tarde del domingo 12 de enero, durante su misión en Jordania, el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, visitó el santuario del Monte Nebo, confiado al cuidado de los frailes de la Custodia de Tierra Santa.

Le acompañaban el nuncio en Jordania, monseñor Giovanni Pietro Dal Toso y monseñor Marco Formica, funcionario de la secretaría de estado vaticana. Fueron recibidos por el Custodio de Tierra Santa, fray Francesco Patton, fray Rashid Mistrih, fray Ammar Shaeen y dos jóvenes frailes de la Custodia, fray Prince y fray Gerald.

La visita al sitio y la misa

Tras una rápida visita al sitio, el grupo pudo admirar los tesoros custodiados dentro de la basílica, en particular los mosaicos bizantinos restaurados. A continuación tuvo lugar la eucaristía del domingo del Bautismo del Señor.

Además de los frailes de la Custodia, asistieron una decena de religiosos y religiosas dossettianos y un par de hermanas del Sermig (Servicio Misionero de los Jóvenes), los colaboradores de la nunciatura en Jordania y un joven cristiano iraquí. 

En su homilía (texto completo en anexo), el cardenal recordó tanto el Bautismo de Jesús, en el centro de la liturgia dominical, como la figura de Moisés que “desde esta sagrada montaña orienta nuestra mirada hacia lo alto, hacia el cumplimiento de todas las promesas de Dios en Cristo”. Finalmente, se refirió al tema de la esperanza, leit motiv del año jubilar que acaba de empezar.

La labor de la Custodia

En la celebración, vivida de manera recogida y familiar, el cardenal Parolin agradeció a los frailes de la Custodia de Tierra Santa su recibimiento y el cuidado con el que custodian los santos lugares, y subrayó el valor de esta labor citando al santo papa Juan Pablo II: “La concreción física de la tierra y sus coordenadas geográficas, son una sola cosa con la verdad de la carne humana asumida por el Verbo” (Carta del Jubileo 2000, n. 3)

La celebración fue seguida de una cena fraternal en el refectorio del Nebo, con la presencia de la ministra jordana de Turismo, Lina Ennab. Durante la comida, el Custodio y los frailes pudieron poner al día al Secretario de Estado sobre la situación de los cristianos en Tierra Santa y sobre las dificultades que la propia Custodia tiene que afrontar en este periodo. Al final, se intercambiaron regalos y las últimas palabras de agradecimiento y de despedida por parte del Custodio de Tierra Santa y del cardenal Parolin. 

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