Tradicionalmente la Iglesia de Tierra Santa se reúne, invitada por el Nuncio y Delegado Apostólico, para celebrar la Misa en el aniversario de la elección del Santo Padre.
Este año el Nuncio, Mons. Antonio Franco, ha querido que se celebrasen más Misas: una en los Territorios Palestinos, en Belén, el martes 15 de abril; la otra en Israel, en Jafa, en la parroquia de San Antonio, no lejos de la sede de la nunciatura [1], el miércoles 16; y la última –como es tradición- en el Instituto pontificio Notre Dame de Jerusalén, el jueves 17 de abril.
Además del hecho de que los cristianos de los Territorios no son libres generalmente para poder entrar en Jerusalén, excepto si están provistos de un pase que les capacita para ello, como en el caso de religiosos y religiosas, o si gozan de un permiso, esta multiplicación de las celebraciones ha manifestado la doble función del Nuncio.
De hecho, Monseñor Franco desempeña en Tierra Santa la función de Nuncio apostólico (o embajador de la Santa Sede) ante el Estado de Israel, y la de Delegado apostólico en Jerusalén y Palestina. Según el Derecho Canónico, su servicio consiste en establecer relaciones e informar, sin autoridad por tanto sobre los Obispos locales o de la zona.
También es Nuncio por Chipe, aunque hay que precisar que el territorio de su competencia no coincide con el de la Diócesis de Jerusalén. De hecho, Jordania y la Santa Sede mantienen, desde 1994, relaciones diplomáticas. Por tanto hay otro Nuncio en Jordania, acreditado también ante Iraq. Cada una de estas celebraciones en honor del tercer aniversario de la elección del Santo Padre Benedicto XVI, ha congregado una gran cantidad de fieles y de representantes oficiales de las Iglesias hermanas y Autoridades locales. A todas ellas han seguido recibimientos, ocasiones especiales para reencontrarse e intercambiar las últimas noticias en una atmósfera de alegría ecuménica y de amistad cordial.
En Belén los fieles árabes y los representantes de la Autoridad Palestina han respondido en gran número. En Jafa, el cuerpo diplomático y la comunidad filipina han hecho honor a la invitación recibida. La Santa Misa ha estado animada por una coral filipina perteneciente a "Couple for Christ". En Jerusalén, la asamblea estaba esencialmente compuesta por religiosos y religiosas de la Ciudad y sus alrededores.
En fin, mientras el Santo Padre se encuentra en los Estados Unidos, estaba muy presente en el corazón de la Iglesia de Tierra Santa donde su elección al solio pontificio se ha celebrado con gran alegría.
MAB
[1] Habitualmente el Nuncio y Delegado apostólico reside en Jerusalén, en la ladera del Monte de los Olivos, pero la sede oficial de la Nunciatura para el Estado de Israel está en Jafa (en la periferia de Tel-Aviv, capital del Estado), al lado del convento franciscano de San Pedro.
Este año el Nuncio, Mons. Antonio Franco, ha querido que se celebrasen más Misas: una en los Territorios Palestinos, en Belén, el martes 15 de abril; la otra en Israel, en Jafa, en la parroquia de San Antonio, no lejos de la sede de la nunciatura [1], el miércoles 16; y la última –como es tradición- en el Instituto pontificio Notre Dame de Jerusalén, el jueves 17 de abril.
Además del hecho de que los cristianos de los Territorios no son libres generalmente para poder entrar en Jerusalén, excepto si están provistos de un pase que les capacita para ello, como en el caso de religiosos y religiosas, o si gozan de un permiso, esta multiplicación de las celebraciones ha manifestado la doble función del Nuncio.
De hecho, Monseñor Franco desempeña en Tierra Santa la función de Nuncio apostólico (o embajador de la Santa Sede) ante el Estado de Israel, y la de Delegado apostólico en Jerusalén y Palestina. Según el Derecho Canónico, su servicio consiste en establecer relaciones e informar, sin autoridad por tanto sobre los Obispos locales o de la zona.
También es Nuncio por Chipe, aunque hay que precisar que el territorio de su competencia no coincide con el de la Diócesis de Jerusalén. De hecho, Jordania y la Santa Sede mantienen, desde 1994, relaciones diplomáticas. Por tanto hay otro Nuncio en Jordania, acreditado también ante Iraq. Cada una de estas celebraciones en honor del tercer aniversario de la elección del Santo Padre Benedicto XVI, ha congregado una gran cantidad de fieles y de representantes oficiales de las Iglesias hermanas y Autoridades locales. A todas ellas han seguido recibimientos, ocasiones especiales para reencontrarse e intercambiar las últimas noticias en una atmósfera de alegría ecuménica y de amistad cordial.
En Belén los fieles árabes y los representantes de la Autoridad Palestina han respondido en gran número. En Jafa, el cuerpo diplomático y la comunidad filipina han hecho honor a la invitación recibida. La Santa Misa ha estado animada por una coral filipina perteneciente a "Couple for Christ". En Jerusalén, la asamblea estaba esencialmente compuesta por religiosos y religiosas de la Ciudad y sus alrededores.
En fin, mientras el Santo Padre se encuentra en los Estados Unidos, estaba muy presente en el corazón de la Iglesia de Tierra Santa donde su elección al solio pontificio se ha celebrado con gran alegría.
MAB
[1] Habitualmente el Nuncio y Delegado apostólico reside en Jerusalén, en la ladera del Monte de los Olivos, pero la sede oficial de la Nunciatura para el Estado de Israel está en Jafa (en la periferia de Tel-Aviv, capital del Estado), al lado del convento franciscano de San Pedro.