La embajada de Italia en Israel celebra el mensaje de Francisco de Asís | Custodia Terrae Sanctae

La embajada de Italia en Israel celebra el mensaje de Francisco de Asís

Las jornadas tituladas “El camino del hombre: ocho siglos del mensaje de Francisco de Asís”, con una duración de tres días, han concluido con la marcha entre Neve Shalom-Wahat as-Salam y Ain Karem. Estas jornadas, organizadas por la embajada italiana en Israel, el ayuntamiento de Asís y la Custodia de Tierra Santa, se encuadran en el marco de las celebraciones del octavo centenario del nacimiento de la Orden, celebrado este año en todo el mundo.

Para los italianos, cristianos o no, creyentes o no, san Francisco forma parte del patrimonio nacional y todos están de acuerdo en hablar de la actualidad de su mensaje. Lo que la embajada italiana ha querido presentar y celebrar ha sido la contribución de la presencia franciscana de Tierra Santa a lo largo de los siglos y la actualidad del mensaje de san Francisco en Israel.

Las treinta personas que han participado en la marcha entre Neve Shalom-Wahat as-Salam y Ain Karem no se han dejado desanimar por la lluvia de esta mañana. Llegados a Ain Karem, fueron recibidos por el Custodio de Tierra Santa, fray Pierbattista Pizzaballa y por fray Oscar Mario Marzo.

Este último, ha hecho de guía al grupo que ha llegado en el horario previsto, comenzando la visita frente al texto del Benedictus escrito en hebreo. Los participantes venían de diversos lugares. La mayoría eran israelíes, más numerosos que los italianos residentes en el país. A ellos se les han unido rápidamente otras personas deseosas de participar en la visita. Entre ellas, el embajador italiano en Israel, don Luigi Mattiolo, y don Francesco Greco, del Ministerio italiano de Asuntos Exteriores y director general de Promoción cultural. Todos los presentes han mostrado una sincera curiosidad sobre las distintas dimensiones culturales del santuario en cuanto a su significado para los cristianos. Fray Oscar, en hebreo, y fray Harout, de la comunidad de san Juan Bautista, en italiano e inglés, han respondido a las numerosas preguntas que les hacían. Después, el grupo se ha acercado hasta la Casa Nova, donde les estaba esperando un rico buffet. Los frailes de la comunidad que les han recibido han tratado, en la medida de lo posible, prepararlo todo de tal forma que los judíos religiosos pudieran también participar en el almuerzo, evitando las incompatibilidades del Kashrut. Después de comer, los participantes han vuelto a la iglesia donde han escuchado algunas palabras de los responsables, disfrutando después de un concierto interpretado por el coro Yasmeen, del Instituto Magníficat de San Salvador.

Así ha transcurrido el último día de las jornadas. El miércoles, 11 de noviembre, en el marco de un seminario titulado “Viajeros, peregrinos y testigos: el encuentro con la Tierra Santa/ Tierra Prometida”, se desarrollaron una serie de conferencias de gran calidad dirigidas por conferenciantes judíos, cristianos y musulmanes. Para la Custodia, ésta ha sido ocasión de verificar que su historia interesa a investigadores apasionados, y también de descubrir nuevas fuentes históricas, antes desconocidas, como el diario de un fraile franciscano alemán escrito durante su estancia en Tierra Santa entre los años 1748 y 1752. Este manuscrito, que se encuentra en Baviera, contiene numerosas informaciones y está enriquecido con los dibujos de las plantas de algunos de los conventos visitados por el fraile. Otras fuentes de peregrinos musulmanes durante el Imperio Otomano son testigos del estupor que causaba el sonido del órgano y aportan también informaciones nuevas sobre la hospitalidad de los frailes, además de algunos testimonios de peregrinos judíos y protestantes.

La segunda jornada, el jueves 12 de noviembre, consistió en la visita a algunos de los Santos Lugares de Galilea. Tres autobuses salieron de Tel Aviv y de Jerusalén con destino al Monte de las Bienaventuranzas, Tabga y después a Cafarnaúm. El Custodio de Tierra Santa, en el discurso de apertura del seminario pronunciado el miércoles, presentó el espíritu con el que Francisco salió para la misión: “él propone una pedagogía del diálogo que no teme encontrarse con el “enemigo”, porque –simplemente- él ve a un hombre, a un hermano. No tiene miedo a la confrontación, no tiene miedo a las culturas distintas, a las tradiciones diversas, porque sabe que es desde el conocimiento mutuo donde nace el diálogo auténtico. El diálogo que no surja de una profunda y sincera empatía hacia el otro, el diálogo que no nazca del corazón, de la aceptación de los límites propios y ajenos, está destinado a fallar”.

Ha sido este mismo ejemplo el que la Embajada ha querido recalcar presentando estas tres jornadas. Francisco mismo visitó esta Tierra entre 1219 y 1220 y se encontró con el sultán Melek el-Kamel, que en tiempos de la Cruzada estaba considerado como el enemigo por excelencia, el infiel. Este testimonio profético de diálogo y respeto entre culturas diferentes es todavía ejemplo para el hombre de nuestro tiempo.

El mensaje de san Francisco, en esta región, no es sólo actual sino también urgente.

Mab