Giotto en Jaffa | Custodia Terrae Sanctae

Giotto en Jaffa

Giotto ha vuelto a Tel Aviv, aunque esta vez al barrio sur de la ciudad y, precisamente, a Jaffa, donde se encuentra el Academic College de Tel Aviv-Yaffo, en donde permanecerá hasta el 28 de octubre, o quizá más tiempo. Estamos hablando, naturalmente, del modelo a escala 1:4 de la Capilla de los Scrovegni de Padua, del siglo XIII, con el famoso ciclo de frescos pintado por Giotto. El modelo ha sido diseñado y realizado como un instrumento de promoción de Padua y del Véneto, en el interior de Italia, y en el exterior, de la Comuna, la Provincia y otras instituciones paduanas. Desde 1993 ha dado prácticamente la vuelta al mundo.

El año 2008 la Comuna de Padua se lo regaló a la Custodia, entre otros motivos porque todas las escenas de la vida de Jesús realizadas por Giotto están ambientadas en una Tierra Santa de fantasía. La muestra ya estuvo alojada en Jerusalén, donde cosechó un éxito excepcional, sobre todo entre el mundo hebreo, y el mes de noviembre pasado millares de visitantes pudieron visitarla durante dos meses en el Erez Museum de Tel Aviv. Decenas de grupos de turistas israelíes con sus guías y maestros con sus alumnos juzgaron de gran interés conocer a través del fresco lo que es la historia de la Salvación según la narración evangélica, así como el punto de vista cristiano; de este modo, el arte de Giotto ha vuelto a desempeñar su función didáctica original, como instrumento de evangelización.

Una participación semejante y entusiasta encontró la muestra en Jaffa el miércoles 13 de octubre durante la inauguración oficial que, según la costumbre local, tuvo lugar algunos días tras la apertura. Estaban presente los principales diseñadores y ejecutores de la iniciativa en las personas del P. Arturo Vasaturo y del ingeniero Ettore Soranzo, por la Custodia de Tierra Santa, y Dror Amir, director ejecutivo del Academic College de Tel Aviv-Yaffo, además de otras personalidades como el P. Apollinare Szwed, superior del convento de San Pedro, en Jaffa, responsable de la comunidad católica de lengua hebrea, y el P. Peter Ashton.

Además de la visita a la capilla giottesca, alrededor de trescientas personas escucharon la conferencia sobre Giotto del Dr. David Graves que se llevó a cabo en el auditorium del colegio universitario.
Graves ha sostenido la tesis que ve a Giotto como un puente hacia el Renacimiento, no sólo por sus primeros ejercicios de perspectiva sino sobre todo por el paso de un arte que tiene por motivo el ideal a un arte que se propone como imitación de la naturaleza.

El saludo inicial a todos los presentes corrió a cargo del profesor Israel Zang, presidente del Academic College de Tel Aviv-Yaffo, que recordó el ambiente particular de Jaffa en donde se encuentra esta institución académica: una sociedad donde conviven pacíficamente musulmanes, cristianos y judíos.

La organización de los actos vespertinos fue perfecta en todos sus detalles, con carteles indicativos personalizados, presencia de medios de comunicación, banderas de Israel, de Italia y de la Custodia de Tierra Santa y, naturalemente, el buffet, que precedió a la inauguración en vez de concluirla (y sin que ninguno se fuera tras la consumición, lo cual es otro signo del interés despertado).

Una cosa curiosa, aunque podría ser significativa: el hilo musical de la muestra no ha sido elegido entre el repertorio de música sacra o antigua sino de un CD de arias de ópera interpretadas por Pavarotti, como si el signo de la italianidad de Giotto, Pavarotti o Verdi prevaleciese sobre el de la cristianidad.

FRC