París, 16 de abril de 2013
En presencia del custodio de Tierra Santa, fray Pierbattista Pizzaballa, el guardián de Belén, fray Stéphane Milovitch, y los franciscanos de la Comisaría de París, Versalles inaugura hoy una exposición de los tesoros cristianos de Jerusalén.
Los salones de los Cruzados en el palacio real de Versalles, a las puertas de París, acogen desde el 16 de abril al 14 de julio, la muestra titulada Tesoro del Santo Sepulcro. Regales de las cortes reales europeas a Jerusalén
El evento es especial: por primera vez se exponen juntas 250 obras «desconocidas» llegadas a Jerusalén en el curso de los últimos siglos. Durante tres meses, y por gentileza de los hermanos menores de la Custodia de Tierra santa, se exponen al público estos objetos preciosos que aun hoy en día se utilizan en las celebraciones más solemnes en la basílica que encierra el Calvario y la tumba vacía del Señor resucitado.
Se trata de cálices preciosos, cruces, lámparas, candelabros, píxides y ornamentos litúrgicos regalados por los soberanos europeos como señal de devoción al Salvador, pero también para reafirmar la potencia de la propia casa y del propio estado.
Las obras se expondrán en orden de procedencia –en especial, del Sacro Imperio Romano, de los reinos de España, Francia y Portugal y de la República de Génova- para evidencia cómo disputaban en generosidad las cortes europeas.
La exposición permanecerá abierta todos los días, excepto el lunes, de 9 a 18.30 h, y está organizada en colaboración con el Consejo general de la región de los Hauts-de-Seine, contando con una segunda sede expositiva en la Maison de Chateaubriand, en Châtenay-Malabry. Aquí, el público podrá admirar nuevos cuadros, también pertenecientes a la Custodia. El largo trabajo de preparación de la exposición parisina comenzó hace tres años y al final beneficiará también al nuevo Terra Sancta Museum, que la Custodia quiere inaugurar en Jerusalén en 2015.
www.Tierrasanta.net
En presencia del custodio de Tierra Santa, fray Pierbattista Pizzaballa, el guardián de Belén, fray Stéphane Milovitch, y los franciscanos de la Comisaría de París, Versalles inaugura hoy una exposición de los tesoros cristianos de Jerusalén.
Los salones de los Cruzados en el palacio real de Versalles, a las puertas de París, acogen desde el 16 de abril al 14 de julio, la muestra titulada Tesoro del Santo Sepulcro. Regales de las cortes reales europeas a Jerusalén
El evento es especial: por primera vez se exponen juntas 250 obras «desconocidas» llegadas a Jerusalén en el curso de los últimos siglos. Durante tres meses, y por gentileza de los hermanos menores de la Custodia de Tierra santa, se exponen al público estos objetos preciosos que aun hoy en día se utilizan en las celebraciones más solemnes en la basílica que encierra el Calvario y la tumba vacía del Señor resucitado.
Se trata de cálices preciosos, cruces, lámparas, candelabros, píxides y ornamentos litúrgicos regalados por los soberanos europeos como señal de devoción al Salvador, pero también para reafirmar la potencia de la propia casa y del propio estado.
Las obras se expondrán en orden de procedencia –en especial, del Sacro Imperio Romano, de los reinos de España, Francia y Portugal y de la República de Génova- para evidencia cómo disputaban en generosidad las cortes europeas.
La exposición permanecerá abierta todos los días, excepto el lunes, de 9 a 18.30 h, y está organizada en colaboración con el Consejo general de la región de los Hauts-de-Seine, contando con una segunda sede expositiva en la Maison de Chateaubriand, en Châtenay-Malabry. Aquí, el público podrá admirar nuevos cuadros, también pertenecientes a la Custodia. El largo trabajo de preparación de la exposición parisina comenzó hace tres años y al final beneficiará también al nuevo Terra Sancta Museum, que la Custodia quiere inaugurar en Jerusalén en 2015.
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