Continúa la restauración de las casas de la Custodia en la Ciudad Vieja | Custodia Terrae Sanctae

Continúa la restauración de las casas de la Custodia en la Ciudad Vieja

Miércoles, 19 de enero. Fray Ibrahim Faltas, ecónomo de la Custodia, ha visitado en la Ciudad Vieja de Jerusalén algunas de las casas restauradas o en vías de restauración. Una familia le esperaba y ha preparado un pequeño aperitivo para dar las gracias al ecónomo, los arquitectos, los responsables y, sobre todo, a la Custodia. Es feliz y no deja de demostrarlo.

La Custodia, que está poco a poco restaurando todo su patrimonio inmobiliario, había programado la visita a esta casa. Los albañiles no parecían sorprendidos. Mientras buscaban las causas de la humedad (un viejo alcantarillado), han descubierto que esta casa se había construído sobre otra. A sus pies, tres habitaciones llenas de toda clase de inmundicias que apenas permitían respirar.

Pero lo más sorprendente es que, una vez desescombrada la inmundicia, se ha descubierto otro tipo de estructura. Los operarios locales conocen bien el método de trabajo de sus predecesores y las técnicas desarrolladas durante el Imperio otomano. Han podido distinguir en una de las estancias una estructura mameluca que data, por lo menos, del siglo XVI, aunque se han visto sorprendidos por el muro derecho de esta habitación. Los arquitectos han contactado con el Servicio de Antigüedades israelí. Los muros se han datado en el período bizantino y presentaban probablemente algún retoque cruzado. Los cinco puntos en forma de cruz del muro –iguales a los presentes sobre las columnas de la basílica de Belén- ¿significan quizá que la estancia era una capilla, o quizá una iglesia?

Su conjunto hoy es espléndido. La Custodia ha garantizado una restauración que podríamos llamar “standard”, pero el pavimento en piedra pulida ha sido costeado por la familia. Hace siete meses, 9 personas disponían de tan sólo 50 metros cuadrados en una casa que era insalubre. Hoy, son 120 metros cuadrados y el alquiler no ha aumentado. Las familias cristianas de la Ciudad Vieja no pagan ningún alquiler. Una regla que podría cambiar para hacer que se participe, al menos de forma simbólica, en los esfuerzos realizados por la Custodia y la Iglesia universal, que la ayuda en este servicio a los cristianos. Una ayuda prestada para que se conserve la presencia cristiana en la Ciudad Vieja de Jerusalén, ofreciéndoles mejores condiciones de vida y frenando de algún modo su emigración.

En la Ciudad Vieja hay 500 casas que esperan para ser ser restauradas. En 2010 se han restaurado una treintena, con un coste total de 2 millones de dólares. De tres años a esta parte se han restaurado 105 casas. Todavía queda lo más importante. La Custodia espera poder hacer frente a este reto, siempre que su economía se lo permita.

Mab

Para conocer más sobre el proyecto “Jerusalén, Piedras de la memoria”, puede visitar el siguiente enlace: http://www.proterrasancta.org/aider-jerusalem/