Caná recuerda el valor del padre Leombruni. Inaugurada una placa de agradecimiento | Custodia Terrae Sanctae

Caná recuerda el valor del padre Leombruni. Inaugurada una placa de agradecimiento

Caná, 5 de junio de 2011

Este pasado domingo, día 5 de junio, se ha inaugurado en Caná una placa conmemorativa dedicada al padre Giuseppe Leombruni, “párroco latino que, con valor y determinación -se lee en la placa, escrito en árabe e italiano-, el 22 de julio de 1948 salió al encuentro de los soldados de la Haganah (ejército israelí), convenciéndoles de que respetaran a la población de Kafr Kanna”.

El padre Michele Piccirillo fue quien, poco antes de su fallecimiento, dictó y encargó la inscripción al escultor Vincenzo Bianchi así como la reproducción en bajorrelieve del retrato de fray Giuseppe.

Originario de Ferentino, donde nació en 1917, el franciscano recordado en Kafr Kanna, Caná, llegó a Tierra Santa con tan sólo 11 años. Bautizado con el nombre de Luis, se convirtió en fray Giuseppe en 1934, siendo ordenado sacerdote en 1942, en plena Segunda Guerra Mundial.

El episodio recordado en la placa inaugurada en su memoria se remonta a los meses que siguieron a la división de Palestina entre árabes y judíos y la proclamación del Estado de Israel, que se corresponde con la primera guerra árabo-israelí. En julio de 1948 y escuchando el consejo del padre Leombruni, los habitantes de Caná optaron por no huir cuando llegó el ejército.

Cuando esto sucedió y con gran valor, el padre Leombruni se dirigió hacia los soldados israelíes para explicarles que la población no tenía intención de ofrecer ninguna resistencia, un gesto gracias al cual se evitó el exilio forzado.

“La Custodia no olvidará lo que ha hecho en Caná, y si Caná es aún hoy cristiana se lo debe a usted, a su abnegación y a costa del riesgo de su propia vida”. Así escribía al padre Leombruni en 1972 el entonces padre Custodio, fray Erminio Roncari.

Un agradecimiento semejante se ha manifestado este domingo con motivo de la presentación de la placa, inaugurada tras la misa presidida por el padre Amjad Sabbara.

En nombre de la embajada italiana estaba presente la señora Teresa Basha mientras que el padre Quirico Calella ha respondido al agradecimiento en nombre de la familia de fray Giuseppe, subrayando cómo en 1948 y también en muchas otras ciudades (Acre, Mujedel, Tiberíades, Nazaret, Ramle, Jaffa y Ain Karem) los franciscanos estuvieron siempre al lado de la población.
Además de la comunidad franciscana de Caná, en la ceremonia han participado también el superior del convento del Monte Tabor, fray Mario Hatshiti, y fray Jak Karam, responsable de Mujedel.

Texto de Serena Picariello