Los estudiantes de la Escuela de Música de la Custodia de Tierra Santa “Magnificat” han ejecutado en Jerusalén los cantos más bellos de Navidad frente a un público numeroso entre los que se encontraban los familiares y amigos.
Ha sido emocionante escuchar al gran grupo de 80 chicos, de 4 a 20 años, entonar en diferentes lenguas aquellas melodías que, oídas por primera vez por los pastores de Belén, ha quedado en el corazón de todos los cristianos, y de todas las personas de buena voluntad. Por lo que no resultaba extraño ver cantar a tantos pequeños de religión musulmana junto a cristianos de diversas confesiones.
Particularmente la danza realizada por un grupo musical de pequeños llenó a todos de emoción. Tomados de la mano, siguieron los movimientos de sus profesoras, una Judía y otra Palestina. Un deseo y una esperanza.
Ha sido emocionante escuchar al gran grupo de 80 chicos, de 4 a 20 años, entonar en diferentes lenguas aquellas melodías que, oídas por primera vez por los pastores de Belén, ha quedado en el corazón de todos los cristianos, y de todas las personas de buena voluntad. Por lo que no resultaba extraño ver cantar a tantos pequeños de religión musulmana junto a cristianos de diversas confesiones.
Particularmente la danza realizada por un grupo musical de pequeños llenó a todos de emoción. Tomados de la mano, siguieron los movimientos de sus profesoras, una Judía y otra Palestina. Un deseo y una esperanza.